21 días, esta vez conmigo

Se cumplen 3 semanas, con sus 21 días, 504 horas, 30240 minutos y sus 1814400 segundos.. Depende en que unidad de tiempo lo tengamos en cuenta, podría parecer una eternidad o insignificante..

Según el psicólogo Williams James, se requieren 21 días para crear un hábito, es decir, mantener en ese tiempo repeticiones constantes de una tarea para que el cerebro las asimile como un aprendizaje, lo acepte y las almacene en su interior..

Si bien hablamos del cerebro, ¿Qué pasa con el corazón?..

Tengo que reconocer que soy una pésima jugadora, intenté engañar y persuadir a ambos con la teoría científica, y sí.. ¿Adivináis quién ha salido perdiendo? Servidora..

Estas 3 semanas han sido un mano a mano con mi cerebro.. Un bombardeo constante de imágenes, lugares.. Sonidos, olores.. Parecen tan simples cosas, pero te pueden hacer caer en un abismo de pena y melancolía.. Lo he intentado, juro que he agotado todas las posibilidades para distraerle.. Pero tu recuerdo es aún mas fuerte que todos los métodos que se me ocurren para fingir que ya no estás en mi mente..

Todo esto a escondidas de mi corazón, queriéndole ocultar mi fantástico plan.. Pensando que por ignorar sus sentimientos, el también se olvidaría de ti.. Menudo fallo garrafal.. 

21 días después puedo decir que todavía se agitan sus latidos cuando pienso en ti.. A la misma vez se resquebraja de dolor sabiendo que todos estos sentimientos no son más que ilusiones, los cuales nos toca almacenar de nuevo en nuestro cajón desastre..

2 meses y medio, 760,418 días, 18250,032 horas, 1095001,92 minutos, 3942006912 segundos.. Ese tiempo fue suficiente para perderme en tus ojos, fue bastante para creer en tus palabras, fue necesario para volver a abrir mi corazón y creer que sigue habiendo amor en este mundo.. Aunque en tus brazos no nació nada que no fuesen adulaciones y mentiras.. Qué pena.

Volví a creer, Volví a emocionarme, he vuelto a sentir.. Antes de ti pensaba que me estaba muriendo.. Como que esto del amor no iba conmigo.. Gracias por hacerme recordar, que merezco todo lo que doy y muchísimo más..

21 días han pasado, y no, no he conseguido olvidarme de ti ni de lo bien que lo pasamos.. Los proyectos que creamos, las promesas que nos contamos.. Y claro que he llorado, como no hacerlo, duele plantar sentimientos y recoger soledad..

Pero, ¿Sabes qué? Todo este tiempo lo he pasado a mi lado, 21 días absolutamente conmigo. Abrigando mi corazón, cuidando mi mente.. Sintiendo amor, igual de puro que aquel que te entregué, aquel que no quisiste valorar ni cuidar, en este caso se trata del amor propio.. Comprendiendo que mi alma, mi cuerpo y mi ser están en un proceso de sanación, restauración.. Sin prisas, aunque sin pausas.. Elevando mi vibración, recargando mi energía.. Agradeciendo todo lo bueno vivido, todo lo bueno recibido, y aún mas lo que queda por venir.. Y lo mejor de todo, que estos días son solo el principio.. Hay mucho más y está de camino..

A veces pensamos que ciertas vivencias son el final, que no hay oportunidades más allá.. Las lágrimas son falsas amigas que nos hacen caer en la desidia, el descuido de uno mismo, la auto-compasión .. Pero hay que retirarse, tomar perspectiva fuera de ese dolor..

Hay que permitirse tener y sentir emociones.. tristeza, alegría, amor, desamor, verdades, mentiras, pasión, pasividad, risas y llantos.. Son todos igual de válidos, y aunque en ocasiones no lo parezca, igual que vienen, se van.. Tenerse paciencia a uno mismo, al igual que sin pensarlo regalamos esa comprensión al de enfrente, no todo se resuelve con las teorías rápidas de un psicólogo.. 

Igual que amas, primero ámate, si perdonas, primero perdónate, si cuidas, primero cuídate..

 Nos centramos a veces en proyectar fuera y salvar a los demás, cuando realmente necesitamos salvarnos a nosotros mismos..

Y no te preocupes, que si no lo consigues hoy, será mañana ese magnífico renacimiento.. Cómo el ave fénix renace de sus cenizas después de preparar y sentir su propia muerte.. Vuelve con mas vigor y fuerza, sano y salvo..

Repítelo cada día, que siempre te acompañe este mantra.. Nunca es tarde para comenzar de cero.. Y menos si es de la mano de uno mismo.. No te falles a ti mismo, quiérete más y sobre todo, quiérete mejor..